Los fundadores de Diaspora, la red social de código abierto que nació hace poco más de dos años, han anunciado que van a poner su proyecto en manos de la comunidad. Dos de los fundadores, Maxwell Salzberg y Daniel Grippi, se centrarán en su nuevo proyecto (Makr.io), aunque seguirán involucrados en la red social.
En estos dos años el proyecto ha pasado por momentos difíciles, como el fallecimiento de uno de sus cuatro fundadores o los problemas económicos que obligaron a volver a pedir donaciones.
Sin embargo, durante todo este tiempo trataron de mantenerse fieles a su objetivo principal: hacer que los usuarios sean los dueños de su información. Esta visión, explican Salzberg y Grippo en su blog, “se ha expandido y ha evolucionado”.
“Diaspora se ha convertido mucho más que un simple proyecto que empezaron cuatro tíos en su oficina en la universidad. Es más grande que cualquiera de nosotros, el dinero que hemos recaudado o el código que hemos escrito. Se ha convertido en algo que importa e inspira a gente de todo el mundo. Creemos que es el momento justo para convertir esto en realidad y poner nuestro código allí donde están nuestros corazones”.
De todos modos, aseguran que, al tratarse un proyecto de software libre sienten la obligación de hacer que avance “por el bien de la comunidad que gira a su alrededor”.
Por lo tanto, aunque creen que ponerlo en las manos de esta comunidad es un gran beneficio, continuarán siendo una parte importante de la misma. Además, por el momento todavía se tienen que resolver varios detalles, por lo que se tratará de un proceso gradual.
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