Hace ya más de dos años un grupo de empresas, entre ellas Microsoft, denunciaron ante la Comisión Europea a Google por abuso de posición dominante en el mercado de los buscadores de Internet. La denuncia fue aceptada y con ello la Unión Europea abrió expediente al mastodonte de las búsquedas que ahora parece que se va a cerrar con acuerdo y no con multa millonaria.
Es lo que se desprende de las últimas declaraciones sobre el asunto realizadas por Joaquín Almunia, comisario europeo de Competencia. Según las mismas, tras el rechazo del primer paquete de medidas que Google presentó a la Comisión para resolver las principales objeciones del organismo regulador, la compañía presentó un segundo paquete que “mejora sustancialmente el anterior”.
“Hemos alcanzado un momento clave en este caso [..] Con las mejoras significativas sobre la mesa, creo que tenemos la posibilidad de trabajar de nuevo e intentar encontrar una solución eficaz”, añadió Almunia.
Los problemas… y las soluciones
Cuando Competencia inició las pesquisas sobre Google en noviembre de 2010, detectó varias prácticas de la empresa que chocan de pleno con el derecho comunitario. Concretamente encontraron indicios de que aprovechan contenidos de terceros sin permiso, imponen condiciones de exclusividad a sus anunciantes y, la principal, discriminan a la competencia al favorecer en los resultados de búsqueda sus propios servicios.
Estas conductas son las que el nuevo paquete de medidas de Google resuelve, ahora sí de forma satisfactoria a ojos de Competencia. Por ejemplo, respecto al tema de los resultados de búsqueda, Almumia explicó que han propuesto una solución que hace que los enlaces de la competencia sean “significativamente más visibles [..] Un espacio más amplio de la página de resultado de búsquedas de Google estará dedicado a ellos. Los rivales tendrán la posibilidad de mostrar su logo al lado del enlace, y habrá un texto dinámico asociado a cada vínculo rival para informar mejor al usuario de su contenido”.
Por otro lado además de las fórmulas concretas presentadas por Google para solventar el resto de problemas, la empresa se compromete a no tomar represalias contra los sitios que le veten el uso de sus contenidos en sus propios servicios y renuncian a firmar acuerdos de exclusividad con editores.
Aún puede haber multa
Pero de momento todo esto sólo es una declaración de intenciones, por ambas partes. Una vez Google presenta a la Comisión Europea el texto legal donde recogen las medidas correctivas, lo escudriñarán de arriba abajo y sólo si la investigación es satisfactoria continuarán por la vía de la negociación “para terminar con una decisión final la próxima primavera”.
En caso contrario, o si detectan que Google no está cumpliendo, el organismo regulador mandará un pliego de cargos a Google, el paso previo para endosarles multa por una cuantía que podría llegar a ser equivalente al 10% de su volumen de negocio.
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