El mercado mundial de la Internet de las cosas alcanzará en los próximos seis años un valor de 7 billones de dólares, una cifra que multiplica casi por cuatro los actuales 1,9 billones en los que está valorado.
Así lo afirma un estudio de la firma analista IDC (International Data Corporation), que pronostica un notable crecimiento de esta industria en los mercados maduros durante los próximos años, que se mantendrá a un crecimiento interanual compuesto de alrededor del 17,5%.
Y es que serán los países desarrollados los que acaparen, en lo que queda hasta 2020, alrededor del 90% de los dispositivos conectados que IDC prevé que se instalen.
“Los consumidores continuarán abrazando la experiencia IoT (Internet of Things) en sus casas, sus coches y muchos otros aspectos de su vida”, señalan desde IDC. “De manera global, los individuos están desarrollando una afición cada vez mayor por la conectividad a tiempo completo, lo que hace de IoT una propuesta muy atractiva”, añaden.
La firma analista sostiene que el sector de la Internet de las cosas, que define como “una red de redes de cosas conectadas que se comunican vía IP sin interacción humana”, crecerá tanto en los servicios a particulares como a empresas, y también en infraestructuras. En IDC creen que la competencia y la diferenciación de productos dentro del sector aumentarán exponencialmente a medida que se acerque 2020.
A los negocios les interesa la eficiencia, las oportunidades de ingreso y las implicaciones para los procesos de producción que las soluciones IoT le pueden aportar, indican fuentes de la firma analista.
“Las empresas se encuentran dando los pasos necesarios para adoptar una mayor comprensión del universo IoT y de su valor global”, ha declarado el vicepresidente sénior de IDC, Vernon Turner, quien asegura que los vendedores de tecnología están reorientando su oferta de un mercado más orientado a los suministros a otro más orientado a la demanda.
La Internet de las cosas se encuentra en plena explosión y, según IDC, los datos empiezan a confirmar que, como ya afirmaba la imaginación de muchos, de momento, es un mercado que no conoce límites.
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