Apple ha prohibido el uso del benceno y del n-hexano en sus 22 plantas de ensamblado del continente asiático después de recibir una solicitud que instaba a la compañía iniciar una investigación inmediata sobre el efecto nocivo de estos dos productos químicos.
La vicepresidenta de Medio Ambiente de Apple, Lisa Jackson, comunicó oficialmente que Apple se hizo cargo de la solicitud y al finalizar las investigaciones no encontró ninguna prueba que indicara un posible riesgo para la salud de los empleados.
Jackson también aseguró que la compañía reforzó las medidas de seguridad para prohibir el uso de los dos productos químicos en los procesos de montaje. El benceno es un carcinógeno y el n-hexano puede dañar los nervios. Los dos compuestos químicos se encuentran en productos comunes como la gasolina o disolventes que se usan para limpiar la maquinaria y en el caso de una exposición prolongada pueden tener efectos adversos para la salud.
Apple decide inspeccionar las instalaciones de sus plantas de producción de iPhone e iPads como consecuencia de una campaña dirigida por China Labor Watch y Green America, dos organizaciones medioambientales que lanzaron una petición en la cual pedían que la compañía de Cupertino prohibiera el uso de los dos elementos químicos nocivos en sus instalaciones de ensamblado.
Las organizaciones que luchan por proteger los derechos de los empleados chinos están contentas con las acciones de Apple pero mantienen sus reservas. China Labour Watch se mostró preocupada por “la habilidad de Apple de monitorizar la aplicación de las medidas”.
Por otro lado Green America, el otro grupo medioambiental, informaba en su página oficial que está satisfecho con la decisión de Apple de proteger la salud de sus empleados , pero le insta a continuar sus esfuerzos y ampliar su investigación:
Aparte del benceno y del n-hexano hay miles de sustancias químicas usadas en los procesos de fabricación y electronica -unas de ellas ni siquiera han sido verificadas- y muchos de los productos químicos usados por los proveedores de Apple quedan confidenciales”.
La organización también menciona que la compañía tendría que comprobar todos los procesos de su cadena de suministro de sus proveedores de segundo y tercer nivel ya que, según sostiene la portavoz medioambiental, es allí donde el uso de productos químicos y los procedimientos de seguridad están menos controlados.
El fabricante de iPhones asegura que continuará sus investigaciones y solicita a sus proveedores respetar las normas recogidas por la Especificación de las Sustancias Reguladas, un informe que el gigante tecnológico acaba de publicar y que hasta el momento era confidencial.
from TICbeat http://ift.tt/1pmn5KG