El baile de directivos continúa en Google. Y es que después de la salida de la compañía de Sebastian Thrun, fundador de la división Google X, y líder de proyectos como las Google Glass, y antes de Hugo Barra, quien fuera uno de los máximos responsables de Android, ahora Andy Rubin, padre del mentado sistema operativo móvil, ha decidido dejar la multinacional tras pasar en ella los últimos nueve años.
Para quienes no lo conozcáis, Rubin es una de esas mentes inquietas del mundo de la tecnología. Desde que abandonó la universidad allá por 1986 (tiene el título de licenciado en Ciencias de la Computación) ha capitaneado proyectos de relevancia, estado involucrado en empresas importantes, y creado varias, destacando especialmente Android Inc., la que desarrolló el SO de mismo nombre y en 2005 los del buscador compraron, pasando Rubin a formar parte de la compañía donde continuó ocupándose del progreso de Android hasta llevarlo a convertirse en el software que hoy conocemos.
Afinando más, de 2005 a 2013 el ingeniero supervisó el desarrollo de Android en Google, año en el que dejó de capitanear el brazo Android de la empresa -fue sustituido por Sundar Pichai, que últimamente no para de subir posiciones en la estructura de la corporación- para llevar el grupo de robótica de Google (el hardware en general, y la robótica en particular, son otras de las grandes pasiones de Rubin).
¿Por qué se va?
Llegados a este punto, la pregunta obvia es por qué Andy Rubin se va de Google. ¿Quizá es que no le daban la suficiente libertad? ¿O lo mismo no es él quien se va sino Google los que le echan? No, nada de eso ni alguna otra cosa más truculenta. En esta ocasión estamos ante una decisión tomada directamente por Rubin provocada por cuestiones personales.
Concretamente, cuestan desde el WSJ que Rubin está montando una incubadora de nuevas empresas interesadas en la construcción de productos de hardware. O sea, que todo apunta a que simplemente se ha cansado de Google y ha decidido arrancar un nuevo proyecto que le apasiona (tienen sentido, es habitual que perfiles como el de Rubin hagan este tipo de cosas).
Así que Rubin cierra un ciclo, para abrir otro, del que seguro saldrán cosas muy interesantes. Y ante esto, sólo nos queda una cosa por hacer: desearle suerte y agradecerle haber creado algo tan notable como Android.
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