El fabricante de circuitos integrados Intel ha sido seleccionado por la china Lenovo, en pleno ascenso en el mercado mundial de móviles, para producir dos piezas clave en el que será su nuevo modelo de smartphone de gama media, del que todavía se desconocen detalles como el precio y el nombre.
Más allá de la alianza entre ambas compañías, este acuerdo coloca a Lenovo tras los talones de dos de los hasta ahora reyes del mercado de chips para móviles: ARM Holdings y Qualcomm. Uno de las piezas que Lenovo le ha encargado es un procesador Intel Atom, diseñado para tareas rutinarias del móvil, algo en lo que ARM es competidor directo.
La otra es un chip módem basado en la tecnología LTE-Advanced. LTE es un campo en el que Qualcomm lleva tiempo manteniendo un cuasi-monopolio, responsable también del célebre sistema conocido como Snapdragon, presente en muchos móviles.
Según recoge el Wall Street Journal, Intel, que llegó en 2011 a este mercado a través de la compra de la división inalámbrica de Infineon, parece decidido a quedarse en él. Sus responsables han dicho que quieren ofrecer a los consumidores un abanico más amplio de proveedores LTE que el actual. “Pensamos que somos una de las pocas compañías que pueden hacer eso y creemos que la diversidad es muy importante”, ha asegurado la vicepresidenta de su departamento de ingeniería, Aicha Evans.
Un reciente estudio de la firma Strategy Analists señalaba el ascenso de los fabricantes chinos Huawei y Lenovo en el mercado mundial de smartphones, que, a pesar del crecimiento de la producción global de estos dispositivos, está viendo como los gigantes Apple y Samsung pierden cuota de mercado.
Dicho descenso que podría hacerse todavía más pronunciado ahora que Lenovo acaba de adquirir la división móvil de Motorola, antes propiedad de Google, y responsable de los modelos Moto X y Moto G, con bastante éxito en Estados Unidos.
Intel, hasta ahora vinculado por el público al mundo de los ordenadores, también se encuentra afianzando su incursión en otros sectores, como el de los wearables, en el que ya ha firmado un acuerdo con Google para fabricar los procesadores internos de las Glass y otro con la prestigiosa firma italiana de gafas Luxottica para crear un nuevo modelo de lentes conectadas.
Foto cc: Josh Bancroft
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