Cuando, a finales del pasado octubre, el equipo de Snapchat anunció la llegada de la publicidad nativa a su plataforma, fue muy rotundo respecto a algo: aunque la compañía necesitaba el dinero, no pensaban introducir anuncios en la comunicación personal de su público, como los mensajes y los chats, porque eso resultaría “totalmente irrespetuoso”.
El nuevo formato de anuncio que la aplicación móvil de mensajería fugaz estrenó el pasado jueves, víspera del Black Friday, no involucra chats ni mensajes privados, pero sí tiene que ver con la comunicación de sus usuarios y con contenidos creados espontáneamente por éstos.
Snapchat cuenta con una funcionalidad llamada “Stories” (historias), en la que recopila publicaciones de sus usuarios con un hilo común: conciertos, partidos, eventos deportivos, etc. La pasada semana la plataforma lanzó una story titulada ‘Black Friday’, a la que los usuarios enviaron imágenes y vídeos relacionados con esta tradición anglosajona de compras. El hilo de mensajes, además, contenía mensajes publicitarios de las tiendas Amazon y Hollister, que se mostraban sobre una recopilación de 10 segundos de fotos enviadas a ese.
Como explican en la web Recode, hasta ahora, el contenido publicitario de Snapchat, lanzado en octubre, siempre había permanecido separado de los contenidos creados por los usuarios. Parece, no obstante, que las oportunidades comerciales que las interacciones de los usuarios generan en la app son demasiado jugosas como para resistirse a explotarlas con publicidad.
Según anunció entonces la compañía, la publicidad funciona en su plataforma igual que el resto de contenidos del muro de Snapchat, desapareciendo cuando los usuarios la hayan visto o después de 24 horas, tal y como sucede con el resto de mensajes, fotos y vídeos que se publican a través de la aplicación.
“Queremos ofrecer una experiencia divertida e informativa, tal y como eran los anuncios antes de segmentarse y dar miedo”, dijeron entonces los responsables de la aplicación, en referencia, probablemente, a los anuncios que, en Facebook y Google, contemplan el historial de navegación de los usuarios y los persiguen con insistencia desde las tiendas online que han visitado.
Snapchat es conocida como una aplicación móvil de mensajería fugaz o efímera porque busca desde sus inicios un nuevo concepto de privacidad, a través de un sistema de envío de mensajes y archivos de imagen que desaparecen cuando los receptores los han abierto, como si se autodestruyeran. Sus creadores, Evan Spiegel y Bobby Murphy, han explicado alguna vez que la inspiración para este concepto les llegó de los problemas que muchas veces ocasionan esas fotos de Facebook en las que nos gustaría que no nos hubieran etiquetado.
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