Se trata, quizás, de la función más demandada por los seguidores de la red social -aunque por detrás, eso sí, del botón de ‘no me gusta’- y ha llegado ya a su versión web y a su versión para Android: los posts en Facebook podrán ser editados aun después de ser publicados. Pronto estará disponible también en iOS.
Así, todos los errores tipográficos fruto, por ejemplo, de las pantallas táctiles de nuestros smartphones podrán ser subsanados, sin necesidad de perder todos los ‘me gusta’ y los comentarios cosechados hasta entonces ni de tener que volver a hacer la publicación.
Si bien desde verano de 2012 podemos editar nuestros comentarios en publicaciones, éstas no contaban todavía con esa opción, por culpa de un dilema casi moral, cuenta el redactor Josh Constine en TechCrunch, que frenaba a los responsables de la red social. Éstos, asegura el blog de tecnología, estaban preocupados por la posibilidad de que una herramienta para editar los posts se convirtiera en una máquina de desdecirse y hacer “trampas” con los contactos de Facebook. Una especie de “pero si yo no he dicho eso”.
La solución al dilema, sin embargo, vino de la mano del historial, también presente en los comentarios editados, que permite que los usuarios aprobados para ver la publicación final accedan también a un histórico en el que aparecen la original y todas sus revisiones posteriores. Así no hay ni trampa ni cartón.
La herramienta funciona de manera sencilla y casi idéntica a la edición de comentarios: cuando realicemos una publicación de la que no estemos del todo satisfechos, solo debemos pulsar en la flecha que se muestre en la esquina superior derecha del post, donde se desplegará un menú entre cuyas opciones figura una llamada ‘Editar’. Entonces se abrirá un cuadro de texto con la publicación original lista para hacer las correcciones oportunas. Cuando terminemos, pulsamos “Edición terminada”, y listo.
Foto cc: angelocesare / AJC1
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