Lo del ascenso meteórico del fabricante chino de smartphones y tabletas Xiaomi es digno de estudio profundo. Y es que, si el otro día un trabajo de la consultora Kantar Worldpanel ComTech apuntaba que la compañía ya había logrado superar a Apple en ventas en China, en las últimas horas otro de Canalys asegura que Xiaomi se ha convertido en el primer fabricante de smartphones de China, gracias al volumen de ventas que ha cosechado en el segundo trimestre de 2014, adelantando con ello al mastodonte Samsung, quien había ostentando ese puesto en el país en los últimos años.
Entrando en los números, la firma de análisis indica que, de mayo a junio de este año, Xiaomi ha vendido aproximadamente 14,99 millones de smartphones, quedándose con un 14% del total del mercado chino (el más grande del mundo ahora mismo) y la primera posición de fabricante líder que decíamos antes, seguido de cerca por Samsung, compañía que logró colocar 13,22 millones de terminales en el mismo periodo, lo que representa un 12% del mercado, y Lenovo (13,02 millones de smartphones vendidos), Yulong (12,72 millones) y Huawei (11,86 millones).
¿Y qué pasa con LG, Apple y otro grandes de la industria que operan en China? Pues Canalys los mete a todos en el apartado Others sin especificar la cuota de cada uno, y también dicen que Samsung y Apple son los únicos proveedores internacionales en el top 10 de fabricantes en China (en conjunto comercializaron 20 millones de unidades, el equivalente al 18% del mercado chino de teléfonos inteligentes).
Grandes fabricantes internacionales, preparaos
Si tenemos presente ese último dato de que 8 de los 10 principales fabricantes de smartphones en China son compañías autóctonas, y el hecho que hemos visto de que Xiaomi ya ha superado a Samsung en el país, todo apunta a lo mismo que diversos estudios vienen advirtiendo en los últimos tiempos: que estamos asistiendo a un profundo cambio de ciclo en el mercado de los dispositivos móviles por el que los fabricantes chinos están cobrando mucha fuerza y van hacer sudar tinta a los grandes fabricantes internacionales si estos quieren mantener posiciones aunque sea similares a las que ostentaron antaño.
Obviamente, hoy por hoy, en términos globales Samsung, Apple, LG y demás siguen mandando, pero varios de los mentados fabricantes chinos ya han empezado a operar en otros mercados más allá de ese y es cuestión de tiempo que ataquen a nivel internacional con todas las ganas, movimiento complicado pero con el que, si consiguen ejecutarlo bien a todos los niveles, de seguro lograrán hacerse con más trozo del pastel (sobre todo porque el catálogo de terminales perfectamente equilibrados entre lo que ofrecen y lo que cuestan es altamente tentador).
En los próximos meses veremos por dónde van evolucionando las cosas. Lo que está claro es que los mayores beneficiados de que algo así ocurra seremos nosotros, los consumidores, porque a más competencia, mejores terminales en todas las marcas a precios más bajos (probablemente los chinos seguirán dominando ese factor, sin embargo el resto quieran o no algo tendrán que recortar en sus beneficios).
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